sábado, 7 de septiembre de 2013

06 SEPTIEMBRE 2013

Sábado, 07 de Septiembre de 2013




1991La URSS reconoce la independencia de las tres repúblicas bálticas (Estonia, Letonia y Lituania).
1978Israel y Egipto firman los acuerdos de paz para Oriente Medio en Camp David (Estados Unidos).
1976Presentado en Madrid el Frente de Liberación de la Mujer.
1970Yaser Arafat es nombrado general en jefe de las fuerzas revolucionarias palestinas.
1966El primer ministro de Sudafrica, Hendrik Verwoerd, es asesinado a cuchilladas en el parlamento.
1941La obligación de vestir la Estrella de David con la palabra Judío inscrita, se extiende a todos los Judíos a partir de 6 años en las zonas ocupadas por los Alemanes.
1932Primer divorcio en España.
1930Golpe militar en Argentina, el general José Félix Uriburu derroca al presidente democrático Hipólito Yrigoyen. Comienza la Década Infame.
1885Muere el inventor del primer submarino español Narcís Monturiol.
1564García de Toledo, Marqués de Villafranca y Virrey de Cataluña, recupera el Peñón de Vélez de la Gomera para España por orden de Felipe II.
1522Llega a Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), Juan Sebastián Elcano, tras dar la primera vuelta al mundo.
1939Primer ataque aéreo alemán contra Inglaterra en la segunda guerra mundial.


Perdón, perdón, perdón !!!! Se me olvidó ayer publicar la nueva entrada.

Menos mal que los ávidos escritores funcionan como una alarma y me lo recuerdan estén donde estén y sea a la hora que sea. Thanks por el recordatorio. ;-)

Por tanto, cinco nuevas palabras para hoy/ayer:

ADENTRO
CONFIDENCIAL
PASTEL
CABLE
DESAYUNO

"Bebo para olvidar, pero ahora... no me acuerdo de qué." Frida Kahlo

Por cierto.... ¡¡¡ Suerte MADRID !!!



6 comentarios:

  1. CABLE URGENTE

    Sargento, deje de engullir ese pastel del desayuno y venga para adentro, acaba de llegar un cable confidencial.

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  2. DESAYUNO

    Mientras su marido revisa las noticias parapetado tras el periódico como todas las mañanas a la hora del desayuno, su amante espera que le llame para comunicarle el fatal desenlace y su liberación.

    Ella remueve sin parar el café que hace ya tiempo ha disuelto la sacarina. El timbre del teléfono la hace brincar en la silla. El ayudante del general lo coge y cruza unas pocas palabras en voz baja con el interlocutor. Los nervios la están matando.

    “URGENTE y CONFIDENCIAL” musita el ayudante tendiendo el auricular.

    Su marido atiende la llamada sin pronunciar palabra mientras ella dirige miradas furtivas a la puerta.

    ¡Por fin! Silenciosa como un fantasma, el ama de llaves atraviesa lentamente la estancia con el pastel preferido de su esposo, ése que ella nunca prueba porque es una bomba de calorías.

    Un suspiro, quizá más fuerte de lo normal, ella no se percataba de que estaba conteniendo la respiración, llama la atención de Eugenia, el ama de llaves que, sin detenerse, dirige la mirada hacia su señora, creyendo que le quiere decir algo.

    “¡¡No, no no!!”. La mirada de horror precede al estruendo que provoca la caída de Eugenia al tropezar con el cable del teléfono y estampar la bandeja contra el suelo.

    Parecía un inocente pastel pero dentro, muy adentro, Silvia había introducido las gotas de aquel carísimo veneno tan difícil de conseguir y de detectar que confiaba cambiaría su vida y ahora permanecía desperdigado por la alfombra, condenándola a continuar desayunando días tras día con ese hombre que jamás la dejaría marchar.

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  3. No hay cables ni e-mail, solo una visita nocturna

    Como todas las noches, soy incapaz de acostarme pronto. Siempre algo me reactiva, a veces puede ser una película, un buen libro otros días la compañía que por casualidad está conmigo ese día o de forma planificada.
    Esa noche, parece especial. Cuando me dirigía a la cocina para preparar el café para el desayuno, y mientras comprobaba si quedaba pastel del día anterior, comenzó a sonar el interfono. Creo que con mi cara de sorpresa, me dirigí a contestar sin ser capaz de analizar quién podría llamar a esas horas tan extrañas.
    Por el video, se ve lo que puede parecer un oficial. Esto significaba dos cosas, o que tenía trabajo extra y una nueva misión, o que algo había ocurrido.
    Procuré no ponerme nerviosa, dirigí mis pasos al despacho por si tenía algún cable pendiente en el FAX o algún correo confidencial en el e-mail.
    Al sonar el timbre de la puerta salgo de mi estado de concentración y comprobando que la pistola está en la repisa, escondida en el baúl de caramelos, miro por la mirilla para ver su cara más claramente. No soy capaz de identificar quién es.
    Es un hombre atractivo, parece un oficial de policía que viene de paisano, pero por su actitud parece algo mucho mas intrigante, es alguien de la profesión. Preguntando quien es, comienzo a abrir la puerta. Su voz suena grave, es un hombre de carácter que viene a algo en concreto.
    - Soy Antonio López, amigo de Mikel.
    Esa es una de las claves, cuando se trata de algún tipo de trabajo con el departamento de seguridad nacional.
    No me gusta que vengan a casa, saben que este es mi escondite donde soy otra persona, mientras camina hacia el salón dirijo sus pasos hacia el despacho. Es menos personal.
    - Le indico pase adentro. Vengo en seguida.
    Desde la puerta, le digo
    - ¿quiere tomar algo?
    Su respuesta fue inmediata,
    - tengo prisa. Conoce el protocolo, no debería estar aquí.
    Dejando una bandeja con café y dos tazas, y mientras estoy preparándome uno, comenzó su monólogo. Demasiado críptico y aséptico en mi opinión.
    Pienso, este hombre con lo atractivo que es, que seriedad. Evito ir más allá intento concentrarme y traducir sus frases según el código aprendido.
    Dejando unos billetes de avión en la mesa, se levanta indicándome que tengo que coger un avión en unas horas para averiguar quién es el traidor. En unos días volveremos a encontrarnos.
    Así comenzó mi misión, aquella mañana en el aeropuerto. Mi disfraz de gran empresaria aprendido y embarcando hacia mi destino. Un destino que marcaría mi vida para siempre.

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  4. STOP, CONFIDENCIAL!!!

    Si usted esta leyendo ahora mismo este cuento telegráfico --sin acentos porque aun no domino la tablet desde la que escribo-- es que no ha respetado mi advertencia o quizá no ha leído el titulo que le precede: confidencial.
    No debería haber siquiera intentado descifrar el cable encriptado que le envíe a su esposa y, por tanto mi querida amante amadisima a la que he dejado calentando mi cama tras comerla a besos como si tragara un pastel en el desayuno.
    Solo así se habría evitado el terrible disgusto de imaginarnos juntos en la alcoba, retozando en la alfombra o riendo a carcajadas pensando en su cara de perro, con el hocico torcido y su gesto malencarado. Amigo mio, ya se lo deje claro desde el principio: esta misiva era personal e intransferible y por eso solo le pido que no haga un escandalo y sus cuernos se metan bien adentro. Suyo, afectisimo, el amante de su amantisima esposa.

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  5. TOMAREMOS UN DESAYUNO EN PAZ

    Llovía. Llovía insitentemente como casi todas las noches desde hacía casi un mes. Las visitas nocturnas con el inspector de policía a los domicilios de la víctimas estaban empezando a ser una rutina a la que nunca llegaría a acostumbrarse. Ser el juez forense en una ciudad en el que el índice de criminalidad superaba con creces la media nacional no era ni mucho menos un trabajo agradable.

    En estos últimos treinta días el maldito criminal estaba siendo realmente activo. Como todo asesino en serie dejaba su firma en cada uno de los asesinatos. Realmente es lo que diferencia a un asesino en serie de un vulgar matón. Hacía unas semanas le habían facilitado el informe confidencial de su historial delictivo y estaba sinceramente impresionado. Sin ninguna duda presentaba unas marcadas ansias de poder y una exigencia claramente sexual. Los crímenes se habían llevado a cabo de una forma similar, y las víctimas compartían las mismas característica. Todas eran jovenes camareras, morenas, con el pelo corto, muy corto; y todas habían aparecido maniatadas, violadas y con el cable del teléfono alrededor del cuello, con el típico nudo de las horcas. Esa era su firma. Ponía el cable en el cuello una vez que las víctimas estaban ya muertas, nadie sabía porque. No hubo ni una sola víctima sin su cable de teléfono, ni un cable del teléfono sin su dogal de verdugo.

    Llegó hasta la línea de policía a las cinco de la mañana, solo media hora después de recibir la llamada. Se identificó ante el agente que le salió al paso y mientras se iba ajustando unos guantes de latex fue preparandose para el impacto de un nuevo escenario del crimen.

    El inspector le salió al paso:

    - ¿Otra vez él?
    - Sí, es él. Adentro, en la habitación principal.

    No podía entender porque el inspector mantenía una media sonrisa cuando el criminal había vuelto a actuar y tenían un nuevo cadaver entre las manos.
    Mientras avanzaba por el pasillo, el inspector, andando junto a él un paso por detrás, iba comentando sus averiguaciones.

    - La víctima, 20 años, camarera del VIPS. Como siempre morena, alta, pelo corto. Violada y asesinada con un fuerte golpe en el base del cráneo.
    - ¿Y el cable del teléfono?
    - También. Pero esta vez no en el cuello de ella.

    La sorpresa le obligó a detenerse justo en el umbral de la puerta del dormitorio. Desde esa posición, dirigió la vista al interior y sobre la cama pudo ver el cuerpo desmadejado de la chica y sobre él, el cuerpo de un hombre desnudo, gordo y azulado, de cuyo cuello aparecía el extremo de un cable telefónico, que sin necesidad de verlo, suponía que tenía un nudo de verdugo alrededor de su amoratada papada. Ante la sorpresa, el inspector continuó con su diatriba:

    - El hombre murió axfisiado. Ahogado con el cable del teléfono practicando hipoxifilia mientras violaba a la chica. El cable estaba atado a la lámpara del techo. Creemos que esto es lo que hacía siempre, pero esta vez sospecho que se le fue de las manos y no paró a tiempo. Estamos investigándolo, pero creemos que es ÉL.

    Tuvo una sensación extraña. Encontrada entre la sensación de alivio por quitar de la circulación a un criminal peligroso, y la de decepción porque un asesino en serie de tal magnitud hubiese muerto de esta forma tan absurda.

    Firmando el papeleo que exigía el ejercicio forense, únicamente pudo dirigirse al inspector para decirle:

    - Bien, creo que por hoy, y espero que por una larga temporada, hayamos terminado con esto. Tomaremos un desayuno en paz. Yo le invito al pastel.

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  6. EL CABLE IMAGINARIO

    Me desayuno con la noticia de que se ha descubierto el pastel y me han vuelto a echar de una villa. Tan sólo por innovar, por emprender nuevos caminos, por no seguir las normas que me impiden caminar hacia donde me dicen mis adentros.

    Esas normas que me marca un espacio acotado en el que moverme como el caballo que mediante un cable atado al domador está limitado en sus movimientos, por muy bello que sea y muy libre que se sienta.

    Las normas matan, manipulan y dirigen a las masas por motivos quizás confidenciales así que creo que seguiré mi camino alternativo.

    Los cobardes son los que se cobijan bajo las normas (Jean Paul Sartre)

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