viernes, 19 de junio de 2015

19 JUNIO 2015

Viernes, 19 de junio de 2.015
[Santa Aurora, San Deodato de Nevers, San Gervasio, Santa Hilda de Fécamp, Santa Juliana Falconeri, San Lamberto de Zaragoza, San Modesto Andlauer, San Protasio de Milán, San Romualdo]




2002Soldados españoles retoman la Isla Perejil
1998Se firma en Roma, Italia, el Estatuto que establece la Corte Penal Internacional.
1981Se confirma que el aceite de colza industrial, desviado para su venta como aceite de cocina, es el causante del síndrome tóxico que produjo 60 muertos y más de 50.000 afectados en España.
1979Renuncia el presidente Anastasio Somoza Debayle y huye hacia Miami
1950Primer transplante de riñón.
1940La URSS invade los estados bálticos de Lituania, Letonia y Estonia. El general De Gaulle crea en Londres el Comité Nacional de la Francia Libre.
1918Por orden del Partido Bolchevique, el zar Nicolás II y su familia son ejecutados en Ekaterimburgo.
1762Catalina II se convierte en zarina tras el asesinato de Pedro III de Rusia.
1512Las tropas castellanas al mando del Duque de Alba, inician la invasión del Reino de Navarra.
1048Dámaso II es nombrado papa.
[Fuente: efemerides.net]


Pues efectivamente, esta semana se ha dado por finalizada la quinta temporada de la serie Juego de Tronos.

Para los que somos fieles seguidores de la saga simplemente comentar que este último capítulo nos ha dejado con muchas ganas de continuar las historias, pero, resulta que esta serie está basada en la serie de novelas Canción de hielo y fuego, del escritor George R. R. Martin y con esta décima entrega televisiva se ha llegado a las últimas palabras del sexto y último libro.

Por tanto, o sale un libro antes de empezar a rodar la séptima temporada o los señores David Benioff, D. B. Weiss y el propio George R. R. Martin (guionistas de la serie) se ponen las pilas para inventarse algo.

Propongo que les echemos una mano desde aquí. Por ese motivo os dejo esta vez cinco palabras pseudoaleatorias:

VENGANZA
INVIERNO
BUSCAR
TRAICIÓN
MAGIA


Adelante escritores, sed rápidos en vuestras historias porque: "WINTER IS COMING!"


Cuando se juega al juego de tronos sólo se puede ganar o morir. No hay puntos intermedios
Cercei Lannister.

3 comentarios:

  1. VENGANZA EN FRÍO.
    -“Nunca he visto juego de tronos”
    Agosto, cuarenta grados a la sombra. Las moscas caen infartadas de calor y el asfalto se enreda en los pies, pegajoso. Sin embargo, ante tales palabras, un frío como de invierno cubre y congela el instante, y petrifica a todos los que se sientan alrededor de la mesa ocho en la terracita veraniega de Casa Manolo.
    Sara encoge los hombros y se defiende: “¿Qué pasa? Nunca lo he visto. Me suena a rollo”.
    Las carcajadas resuenan afiladas, como espadas.
    -“¿Pero tú dónde te metes, criatura? ¿Vives en un agujero?”
    Seis pares de ojos incrédulos esperan respuesta. El calor ha fundido la magia del hielo imaginario y todos vuelven a sudar de lo lindo.
    -“Pues no sé, habré estado haciendo otra cosa, supongo”. Sara se atrinchera, incómoda, tras una cerveza sin alcohol que se calienta por segundos.
    “¡Ay qué rarita que es mi compañera de piso! Otra cosa, dice: pasarte las noches enteras estudiando, eso es lo que has hecho tú ¡¡Otra cosa no, empollona!!!”
    Laura, buscando la atención de Alberto, no duda en ridiculizar a su amiga con los múltiples detalles que proporciona la convivencia. Sara se pregunta qué ha pasado desde la amable invitación de esta mañana hasta ese momento en que aquella mujer, aguda y pizpireta, le hace el centro de pesadas bromas sobre su amor a los estudios. Percibe con amargura que su presencia en esa terraza sirve únicamente para lucimiento del venenoso ingenio de Laura, la bella, peligrosa e indolente Laura. Con los minutos, la invitación se ha tornado encerrona, y la encerrona, traición. Una especie de cena de los idiotas al aire libre. Y ella, la tímida Sara, es la idiota máxima de esa noche de verano. Le quema la certeza de que mañana se despertará en el piso compartido con esa que se supone su amiga, quien actuará como si todo hubiera sido una broma inocente y le reprochará, otra vez, su escasa sociabilidad. Pobre y solitaria Sara.
    Alberto sigue la escena, como siempre, callado. Alto, reservado y un punto gañán, no parece que encaje entre la corte de pijos que rinde pleitesía ante Laura la deseada. Siempre se mantiene al margen, entre cortés y despegado, en una permanente actitud de espera, atento, sin que parezca que acabe de encontrar aquello que busca. Quizá sea esa frialdad amable la que enaltece a Laura, que le persigue sin tregua, incansable ante el rechazo caballeresco con que Alberto le obsequia tras cada maniobra.
    Cuando las posibilidades de befa se agotan, la mesa se levanta a la orden silenciosa de la reina Laura, y todos, riendo aún, comienzan perezosos la corta ruta hasta el bar siguiente. Sara, torpe, olvidada, la camisa sudada pegada al cuerpo, tropieza entre las patas de las sillas que nadie ha retirado, decidida a desparecer en dirección contraria. Escucha entonces la cálida voz de Alberto, abriéndole paso entre el mobiliario de aluminio:
    -“¿Sabes? Yo tampoco he visto un solo capítulo de Juego de Tronos. Pero no se lo digas a nadie”.
    Cuando Laura se dé la vuelta para verificar si Alberto le mira el culo descubrirá que Alberto no está. Y Sara tampoco. Preguntará y nadie sabrá darle respuesta. Una punzada de fuego le despertará los celos, en los que arderá toda la noche hasta bien entrada la mañana siguiente, cuando Sara aparezca de nuevo en el piso compartido, despeinada, con la ropa arrugada y el rostro radiante y acalorado. Laura le preguntará “¿Qué has estado haciendo?” Y Sara, resplandeciente, contestará: “te diré lo que no he estado haciendo: viendo Juego de Tronos”.
    Sí, es probable que Laura tome venganza. Pero eso forma parte de otra historia. Porque la venganza es un plato que se sirve frío. Y ahora el calor, un calor espeso y húmedo, lo devora todo.

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    1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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    2. Por fin has vuelto ;-)
      Te echaba de menos a ti y a tus historias con esas frases finales que dan sentido a toda la lectura.
      Bien por Sara y por todos los que no siguen a la mayoría. Aunque yo... me reconozco como fan total de la Khaleesi :-O

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