viernes, 4 de octubre de 2013

04 OCTUBRE 2013

Viernes, 04 de octubre de 2013




1986La URSS informa que uno de sus submarinos nucleares se incendió y hundió a mil kilómetros de las islas Bermudas.
1985Mueren 34 reclusos en un motín de una prisión peruana, promovido por la organización guerrillera maoísta "Sendero Luminoso".
1979España ratifica el Convenio de Derechos Humanos.
1966Mediante una fuerte suma de dinero que España entregó al navegante francés Louis Antonie de Bougainville, éste traspasa la islas Malvinas a los españoles.
1957La URSS consigue colocar en la órbita terrestre, por primera vez, un satélite artificial, el "Sputnik I". Un mes más tarde lanza el "Sputnik" II con un ser vivo a bordo: la perrita Laika.
1945El general MacArthur, comandante supremo de las fuerzas norteamericanas en Japón, proclama la Ley de Libertades Civiles en ese país.
1910Fin de la monarquía en Portugal
1904Holanda y Portugal firman un Tratado que fija las fronteras de la isla indonesia de Timor.
1884Un incendio destruye el palacio de Christianburgo, en Copenhague, sede del Parlamento danés.
1830Bélgica se independiza de Holanda.
1824El Congreso de México promulga la Constitución Federal, que divide el país en 19 Estados y 4 territorios.
1553Maria Tudor, hija de Enrique VII y Catalina de Aragón, es coronada Reina de Inglaterra.

Hemos dado dos nuevos pasos en nuestro blog de Cuentos Casuales:

1) Hemos añadido publicidad. Si os habéis dado cuenta, aparecen un par de anuncios a la derecha de las entradas. No se si esto nos reportará o no pingües beneficios, pero si sirve para de vez en cuando tomarnos una cerveza para celebrar el éxito, pues fantástico.

2) Hemos sacado el blog al mundo. Tenemos una cuenta en Twitter (@CuentosCasuales) donde se anunciarán las nuevas entradas y donde podrán aparecer novedades.

Así que esperando que el éxito de este blog alcance cotas inimaginables, lanzamos las cinco nuevas palabras de la semana:

PULSERA
ACCIDENTE
CANDELABRO
PRESIÓN
BAÑAR

A partir de ahora mismo, son todas vuestras.


9 comentarios:

  1. MALDITA PULSERA

    El día había sido agotador. Soportar la presión que sobre ella ejercía su jefe le hacía sentir realmente agotada, por ese motivo decidió bañarse. Se sumergió en el agua, aromática, sensual y cálida y consiguió relajarse hasta perder la noción de dónde estaba.

    Música chillout, velas repartidas por el baño, un gintonic a mano y alguna que otra barra de incienso generaba un ambiente completamente antagónico a lo que había sufrido hoy en el trabajo.

    Sin duda fue el accidente más estúpido que podía ocurrir en ese momento. Al tratar de encender las siete velas del Menorá que tenía en la balda superior. Solo la mala suerte pudo hacer que la pulsera quedase enganchada con uno de los brazos y el pesado candelabro judío cayó sobre su cabeza.

    Perdió la consciencia, su cuerpo resbaló sobre la bañera y se hundió, ahogándose en lo que finalmente sería su húmeda y cálida tumba.

    Sólo un día agotador como aquel debía terminar de esta manera.

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  2. POR ACCIDENTE

    Todo le pasaba “por accidente”.

    Si bañaba al perro, todos los frascos de gel y champú que poblaban la bordes de la bañera acababan dentro. Con el tapón abierto, por supuesto.

    En aquella noche romántica tanto tiempo esperada, acabaron en Urgencias porque se le prendió el pelo con el candelabro que iluminaba la escena con aquella tenue luz.

    La olla a presión ya la tenía condenada al ostracismo. Al menos dos veces los garbanzos habían terminado decorando las paredes.

    No quería pensar que fuera gafe o que alguien le hubiera echado mal de ojo. Pero haberlas, haylas. Así que cuando en la tele anunciaron eso del “Toca madera” con la pulserita de colores, decidió comprarse unas cuantas. Había que reforzar cualquier atisbo de buena suerte que pudiera cazar al vuelo.

    Entró en la página web. Agotadas. Vaya, no empezábamos bien.

    Miró la siguiente entrada de Google. Aprenda a construir sus propias pulseras. ¿Por qué no? Sería entretenido. Se hizo una. Preciosa. Se hizo otra. Más bonita aún. Se hizo más, muchas más. Cada día cambiaba de pulsera, en función de la ropa que llevaba o del sitio a donde iba. Primero fueron sus amigas quienes le empezaron a pedir que les hiciera pulseras personalizadas para ellas. Después sus compañeras de trabajo. Después las amigas de sus amigas e incluso algunas desconocidas que le preguntaban dónde encontraba cosas tan bonitas. La primera siempre era un regalo. Pero las siguientes ¡las pagaban! Empezó a diversificar: colgantes, anillos, pendientes…

    Llegó un momento en que su afición resultaba tan lucrativa que se lio la manta a la cabeza y dejó su aburrido trabajo de funcionaria (bueno, pidió una excedencia, que la mala suerte podía volver en cualquier momento) para poder atender a los pedidos. Empezó a viajar a ferias. La entrevistaron en la radio. Montó una web con un foro que se seguía desde varias partes del mundo. Hasta le contrataron para una tertulia semanal de moda en Tele5.

    Y así fue como llegó este momento en que se deleitaba contemplándose sonriente en la portada de VOGUE, que relataba su historia con ese titular: “Por accidente”.

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  3. El candelabro

    Bañar a los niños, prepararles la cena, pelear con ellos hasta conseguir acostarlos , recoger la cocina, hacer la comida para el día siguiente, … demasiada tensión día tras día. Sus semanas son agotadoras. A veces tiene la impresión de que todos los peores momentos de una vida se concentran en cada uno de esos pequeños ratos. Una presión que, algunos días, a duras penas puede soportar.

    Cuando por fin tiene un hueco, los viernes por la noche, se sienta y repasa mentalmente esos otros ratos que hacen que su vida aún merezca la pena: los juegos, las risas, los gestos de amor de los críos, las travesuras que lo hacen reír e impiden las regañinas, y sin, lugar a dudas, los recuerdos.

    Es como un ritual. Como un protocolo que lo ayuda a entrar en trance. Todo comienza con el día en que le regaló aquella bonita pulsera. Repasa minuto a minuto el día desde que la vio en la tienda y decidió comprársela. Pasa por la emoción que sintió al esconderla y de ahí, por fin, al incomparable momento de ver su sonrisa, sus saltos de alegría, de sentir sus abrazos y sus besos sonrojándolo en mitad del restaurante. No era la pulsera, claro que no, fue la petición de matrimonio lo que tanto la exaltó.

    Luego, sólo esbozos, retazos de una vida, todo borroso: el nacimiento de los gemelos, alguna cena en soledad, momentos de sexo mezclado con risas, y alguna levedad más.

    Son esos recuerdos los que evitan las lágrimas, los que lo acompañan en la soledad de su salón. Hoy hace justo un año de aquel día, cuando se retrasó un poco más al llegar a casa, jugando con los niños en el parque y descubrió el fatídico accidente: la encontró en la bañera, ahogada, con el candelabro colgando de su pulsera.

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  4. Lo más importante que aprendí a hacer después de los cuarenta años fue a decir que no cuando es no. (Gabriel G. Marquez)

    EL ETERNO ACCIDENTE

    Anoche decidí que esta mañana se lo diría, estoy harta de esta relación de broncas y reconciliaciones, no merece la pena y yo ya tengo los ojos puestos en otro futuro. Me molesta todo de él, lo que hace dos meses eran particularidades que le hacían único se han convertido en putas manías que me irritan y me vuelven histérica. Su intento de tenerme en palmitas de ayer consistió en una cena con velas sobre candelabros de plata y una pulsera en mi muñeca como colofón. No aguanto ese tipo de presión y como no podía ser de otra manera terminamos en la cama, esa cama que se me hace diminuta por la cercanía de su aliento, de su olor y de sus abrazos. Por supuesto ha sido un accidente, algo que no volverá a pasar y que jamás repetiré.

    Me he despertado con el baño preparado y una rosa en la bandeja del desayuno, esta noche nos vemos de nuevo.

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  5. Respuestas bajo presión

    Es verdad que tuvimos nuestros altibajos. Que si bien la pulsera le causó una tremenda alegría, no era la misma el día siguiente. A ratos, durante la cena, me pareció que se escondía tras el candelabro, como en ese anuncio de televisión. Puede que fuera la presión de tener que responder en el momento.

    Realmente, después de todo, el inicio de nuestra relación fue por accidente, literalmente. Ella estaba tumbada en su toalla, intentando secarse y cuando le caí encima, la embadurné tanto de arena, que se tuvo que volver a bañar.

    Yo creo que esto siempre marcó lo arenoso de nuestra relación, aunque constantemente procuraba apaciguar su histeria con una rosa, algo que hasta el día de su muerte, siempre me funcionó.

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  6. ACCIDENTES?
    De puta madre, tenía que pasarme hoy:
    Se rompe el candelabro de la abuela,
    Pierdo la pulsera, MI pulsera. El regalo más significativo de nuestra historia
    A Nacho le dan un golpe en el coche. Será torpe!! Accidente que supone ir a trabajar por lo menos una hora antes todos los días. Madrugones a mí? Grgr
    Decido ponerme ese precioso pantalón y con la presión … explota
    Al bañar a Toby… me resbalo con sus juegos y termino en el suelo.

    Llegan las 0.00 y por fin termina este día tan estupendamente!! Mi agresividad y enfado consiguen que lleguemos al punto más álgido….y varias veces. Mmm
    Y me duermo tan ricamente.

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  7. El mayor placer que conozco es hacer sigilosamente una buena acción y dejar que se descubra por accidente. (Charles Lamb)

    QUE PAREZCA UN ACCIDENTE

    La famosa canción de Siniestro Total combinada con sus irritantes risotadas decidió que quería bailar sobre su tumba, así que levanté el candelabro por encima de mi cabeza y le asesté un golpe detrás de la oreja. Creo que aquello no parecería un accidente, así que me dejé llevar, le metí la horrible pulsera que siempre regalaba a sus pretendidas novias en la boca y ejercí presión con mis manos sobre su cuello. Para entonces la idea de bañarnos juntos y ganar la apuesta a sus amigos no le parecía tan graciosa…..

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  8. ¡¡Presión!!

    Solo me lleve mi viejo candelabro y la pulsera de mi madre. Llegue a esa casa x accidente y de la misma forma me voy. Al cerrar la puerta bajo esta tormenta de truenos, no me importò la lluvia. Solo queria salir corriendo..
    Sintiendo la presion en mi interior del dolor profundo el bañarme bajo las nubes suponia un buen comienzo. Tropecé y al levantarme alguien me cubría con su paraguas...
    Un refugio casual... Me levante y sonrei.

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  9. Bajas presiones!!
    Ver el tiempo en la televisión después del telediario es algo muy característico en mi familia. Bien por algún acontecimiento, porque alguien está de viaje o por la curiosidad de saber si aciertan o no al día siguiente con sus previsiones de altas o bajas presiones, lluvias y soles por todo el país.
    Esa noche, era importante, por fin al día siguiente tenía la entrevista con mi editor por ese motivo, estaba nerviosa. El conocer su opinión sobre mi última novela, me condiciona, no puedo evitarlo. Si a él le gusta, le provoca cualquier tipo de emoción lo doy como por un buen augurio, si por el contrario sus críticas son asépticas y frías, sé dónde va el trabajo realizado. A la papelera de reciclaje, que fácil es borrar en un ordenador!! Me río mientras sigo observando al guapo hombre del tiempo.
    Se lo entregué hace dos semanas, una historia y dos títulos:
    El candelabro antiguo
    La pulsera mágica
    La verdad es que no me convence ninguno, pero la historia es buena. Lo sé. A veces una novela comienza con un título y otras veces es el último paso en su creación. En cualquier momento surgirá y sino Él me ayudará. Siempre lo hace.
    Mañana bajas presiones, frio y lluvia… es una señal que encaja perfectamente con mi estado de ánimo. El caos que provoca este cambio de tiempo en cualquier entorno genera en las personas cosas diferentes… A escribir esta posibilidad en mi cuaderno de ideas!! No olvidar. Bueno para describir escenas de cambios!!
    Abandonando cualquier tipo de ideas relacionadas con escribir, me dirijo hasta dónde está mi hermosa perra. Intuye mis movimientos antes que yo misma. -Reina, nos vamos de paseo… no importa si llueve o si no cae nada del cielo, vamos a correr y sentir el viento…Después toca bañarte así que a jugar!!

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